ADIOS A PACO DE LUCIA
Guitarra de mesón que hoy suenas jota, mañana petenera, según quien llega y tañe...guitarra de mesón de los caminos, no fuiste nunca ni serás poeta.
Paco de Lucía rescata la guitarra de los grandes Auditorios, la lleva a la calle y la impregna de música popular, del flamenco de la calle y la devuelve enriquecida al Auditorio.
A mediados de los años 70, en plena efervescencia de la música pop en forma de canción, de repente aparece un disco que se cuela timidamente en nuestra casa. No era canción, era un guitarrista curtido ya en acompañar a cantaores flamencos como Camarón de la Isla, Enrique Montoya, La niña de la Puebla, etc. pero que iniciaba una andadura como solista de guitarra flamenca. No habia antecedentes en esto. Los concertistas hasta entonces eran clásicos: Narciso Yepes, Andrés Segovia, Tárrega etc. El disco en cuestión se llamaba "Fuente y caudal" y el tema extraido en single era "Entre dos aguas". A partir de ahi la guitarra vuelve al Auditorio y Paco de Lucía no deja de ofrecer conciertos.
Colaboró con otros guitarristas de talla internacional (Al Di Meola, John Mc Laughlin), como suele ocurrir los ortodoxos del flamenco criticaron en exceso esa innovación, aparecen otros guitarristas que siguen sus pasos como Manolo Sanlucar y en sus manos, la guitarra flamenca cobró una dimension que antes no tenia sacándola del tablao para llevarla a grandes escenarios.
En los años de la transición fue amenazado por la extrema derecha con partirle los dedos y que no volviera a poder tocar.
Colaboró tambien en discos de amigos suyos como Alejandro Sanz y es la guitarra que suena en Salam Rashid de Joan Manuel Serrat.
Cante, guitarra, sombras, luces,quejio, tablao español de vino y de zambras de donde salió la guitarra para volver con nuevos sones.